miércoles, 3 de junio de 2009

Miércoles 3 de junio

Un llamado a servir a través de la política

Según el Diccionario de la Real Academia Española, la política es la actividad de quienes rigen o aspiran a regir los asuntos públicos, la actividad del ciudadano cuando interviene en los asuntos públicos con su opinión, con su voto, o de cualquier otro modo. Es una actividad que requiere vocación, entrega, dedicación. Debería ser una noble actividad. Apunta al servicio al prójimo. Debería nacer de nuestro amor al prójimo. 

La actitud del cristiano ante la política no debería ser de indiferencia o desprecio. Como hijos de Dios, somos llamados a servir a nuestro prójimo por amor. Hay muchas oportunidades de servir desde la función pública que casi siempre comienzan desde una militancia política. Necesitamos que más cristianos se involucren. Debemos compartir nuestros principios a todos los ciudadanos, y el ámbito de la política es propicio para sembrar.

Desde nuestro lugar de influencia animamos a la participación en política de todos aquellos que tiene esa vocación. Les pedimos que se preparen, que estudien. Argentina necesita políticos honestos y capaces. La honestidad sin capacidad no sirve. La capacidad sin honestidad, tampoco. Ambas deben ir juntas.

Nuestro desafío actual

Nuestra querida nación ha sufrido un largo proceso de deterioro a causa de los malos ejemplos de muchos políticos. Hubo honrosas excepciones que han pasado a la historia, como la de aquel viejo caudillo político, líder de su partido, que murió pobre. Se ha dicho que el poder corrompe. Estimamos que en la preparación que proponemos debe haber una preparación moral y espiritual para afrontar las tentaciones que trae aparejado el poder.

Un peligro que enfrentamos

Suele suceder en periodos preelectorales que somos invitados a formar parte de una u otra agrupación política, no por nuestra capacidad, sino porque podemos conseguir votos. Debemos estar alertas. No podemos vender nuestra primogenitura por un plato de lentejas. En situaciones así es sano tener un círculo de amigos espirituales que nos aconsejen.

Nuestro aporte

En todas nuestras comunidades tenemos preciosos hermanos de todas las edades dispuestos a servir. Cuando hay una necesidad a nuestro alrededor es suplida con amor y entrega. Tenemos jóvenes capaces y sanos. Qué bueno sería verlos contagiando su salud interior a otros. Qué sana influencia para nuestra sociedad será ver a miles involucrados en la política sin temor a contaminarse ni corromperse, porque hay valores muy firmes arraigados en el corazón que les hacen vivir lo que creen y proclaman.      

Nuestro sueño

Soñamos con un cambio fundamental en nuestra patria. Queremos dejar a nuestros hijos y nietos un país donde la justicia prevalece, la equidad es prioridad, los derechos humanos de todos se respetan, y la igualdad es real. Es por esta razón que les animamos a no bajar los brazos. Oremos y actuemos. Desde nuestro lugar de fe, de personas con valores cristianos, enseñemos el camino del amor al prójimo. Que la política sea un instrumento en esta sublime tarea.

En la Biblia tenemos valiosos ejemplos de hombres y mujeres de fe que se comprometieron con su pueblo y actuaron en política siendo una bendición para su pueblo. En la historia, las personas que dejaron huellas en este campo fueron hombres y mujeres de fe. No temamos involucrarnos. Entremos por las puertas que se abren. Ocupemos los espacios que vemos como oportunidades. Creo que haciendo esto también estamos sirviendo a Dios.

Hugo Baravalle

El pastor Hugo Baravalle es Presidente de la Federación Alianza Cristiana de Iglesias Evangélicas de la República Argentina (FACIERA)

Nota: Esta reflexión es un aporte al diálogo entre la fe y la política y no implica ninguna relación del autor con la Coalición Cívica. Para suscribirse al servicio gratuito de reflexiones diarias sobre la política desde la fe, envíe un mensaje en blanco a: elcorazondelapolitica-subscribe@gruposyahoo.com.ar

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